Altos del Arapey.
Vivir las termas a otro nivel
Sábado a la madrugada, auto listo y ganas de una escapada en modo full. Mate en mano, niña colada durmiendo atrás, música de cantantes en español sonando en la radio. Nos adueñamos de la ruta, sin pausa pero sin prisa, y disfrutamos del recorrido hacia nuestro destino final: Altos del Arapey. Por suerte el camino es todo autopista y el cruce a Uruguay por Concordia no demora más de 10 minutos.
Ya en Uruguay el entorno cambia, el terreno se vuelve más movido, una ruta y nada más. Último trapo, entre ripio y asfalto y frente a nosotros un gran hotel, en medio de un paraje de campo, con vidrio y piedra a la vista. Una construcción de no más de 6, 7 años en excelente estado.
Debo admitir que tenía algunos preconceptos, ¡y en gran parte por ignorancia! Cuando me decían Termas, lo primero que pensaba era en gente mayor, hoteles antiguos y una onda Cocoon. Encontrar Altos del Arapey, un hotel moderno, impecable, en un lugar tan lindo, con 10 piletas, una mega pileta interior y exterior, una cancha de golf para despuntar el vicio, caballos, bicis, laguna y encima All Inclusive. Espectacular, disfruté cada minuto de la estadía.
El hotel tiene todo resuelto para que puedas disfrutar plenamente de estar allí. Adentro el aire acondicionado es espectacular. Y eso que fui en pleno enero donde hacía mucho calor. Las habitaciones son cómodas y completas. Los espacios comunes son amplios y hay un poco de todo: Sala de Juegos con ping pong, pool etc.; sala de playstation, sala de lectura sólo para adultos, gimnasio super completo, un spa agradable con tratamientos de entre U$D30 y U$S50 para disfrutar de reflexología, masajes y tratamientos estéticos.
Todos los días el hotel propone una agenda de actividades, tanto para grandes como para chicos. En nuestro caso quisimos aprovechar todo: Tomamos clases de buceo, de golf, hicimos cabalgata, fuimos al gimnasio, nos sumamos al aquagym, al bingo acuático, la verdad es que nos divertimos un montón y no nos faltó tiempo para pasarnos horas flotando en las diversas piletas y siestas en la habitación cuando el sol estaba incendiando el lugar.
El lugar es ideal para ir con niños ya que tiene actividades planificadas y colonia con profesores todo el día. Si uno desea hasta pueden comer con los cuidadores. Se ven muchas familias de abuelos, hijos y nietos compartiendo un lindísimo tiempo de calidad. Los niños cuentan con pileta bajita con tobogán inflable, salón de juegos y manualidades, hamacas y muchos juegos como búsquedas del tesoro y más.
Como el servicio es “All Inclusive”. Uno comienza el día con un enorme desayuno buffet que además cuenta con islas en donde te cocinan en el momento diversos platos, desde omelettes a panqueques. El almuerzo y la cena tienen la misma modalidad que incluye isla de pastas, parrilla, pizzas, y el enorme buffet de entradas, platos y postres. Durante todo el día el bar está abierto para comer algún snack, colación, o tomar el té. En la pileta también hay un bar que sirve tragos y bebidas, que incluso las bebidas con alcohol entran dentro del plan all Inclusive. Hay que medirse un poco porque sino, ni todo el ejercicio del mundo te permitirá mantener el equilibrio.
La verdad es que es una escapada más que recomendable para realizar en cualquier época del año. Parece que en invierno se llena, por lo que también está bueno aprovechar los meses entre medio y disfrutar escapándose un poco de todo. Los beneficios de las aguas termales son muchísimos tanto para la piel como para la salud en general así que bien vale la pena flotar un rato.
En la web del hotel siempre hay promociones o paquetes temáticos. Actualmente tienen una promoción para San Valentín y una propuesta de niños gratis.
Más info: www.altosdelarapey.com